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CARRERÓN HISTÓRICO: JOSÉ MANUEL ABASCAL LOGRA UN “BRONCE DE PELÍCULA” EN LA FINAL DE 1500M. ES LA QUINTA MEDALLA ESPAÑOLA EN ESTOS JUEGOS (Atletismo)



(Enrique del Rosal, 11/08/1984)

Hoy sábado, 11 de agosto, José Manuel Abascal acaba de entrar en la historia del olimpismo español al conseguir un logro que parecía inalcanzable para nuestro deporte. El santanderino ha alcanzado un bronce olímpico en una prueba mítica como es la de los 1500 metros. Tras la medalla conseguida hace 4 años por Jordi Llopart en Moscú, Abascal se convierte en la segunda medalla olímpica para nuestro atletismo y la quinta en estos Juegos Olímpicos de Los Ángeles.

El escenario era espectacular, el Memorial Colliseum de los Angeles, y la final de 1500 m se presentaba apasionante con el “ tridente británico” - formado por Sebastian Coe, Steve Ovett y Steve Cram - y el sudanés Omar Khalifa, el keniata Joseph Chesire, y la “dupla yankie” formada por Jim Spivey y Steve Scott. Contra toda esta espectacular nómina de atletas, dos de los nuestros: José Manuel Abascal y Andrés Vera.

El sol empezaba a calentar el estadio y el público estaba dispuesto a disfrutar de una de las finales reinas en este deporte. Con el pistoletazo de salida, el sudanés Califa y el keniata Chesire se ha puesto al frente de la prueba pero después del primer paso por meta, la locura se desató en el estadio porque el norteamericano Steve Scott se ponía al mando de las operaciones marcando un fuerte tren. Scott iba escoltado por los británicos, el sudanés Khalifa y  Abascal. 

Todo siguió así hasta que a falta de 600 metros el santanderino se jugó el todo por el todo y lanzó un ataque espectacular, sobrepasando a Scott a falta de 500 metros. Coe y Cram seguían la poderosa zancada del español; tras ellos, el keniata Chesire y el americano Spivey trataban de no perder comba.

Pero al pasar por la línea de meta y a falta de 400m, se producía el primer golpe de efecto en la final: Steve Ovett ponía pie a tierra abandonando dramáticamente.  La carrera ya andaba a ritmo frenético con un Abascal que aguantaba “tirando a muerte”  - con el rostro crispado - a la pareja británica. Al llegar a la recta de contrameta Coe y Cram sobrepasan entonces al español, pero el santanderino tenía la meta a 200 metros y lo que parecía un sueño empezaba a parecer real. Se mascaba el sueño.



Instante en el que Ovett (388) echa pie a tierra y se retira
de la carrera. Abascal marca un fuerte ritmo que Coe (359)
y Cram (detrás) siguen de cerca.
Ha sido en ese momento cuando el keniata Chesire se ha pegado  a Abascal y se ha prolongado cual sombra del cántabro. Coe y Cram iban por delante luchando en otra guerra por el oro mientras José Manuel empezaba a ver cercana la meta. Apretando los dientes, en un final de infarto, el cántabro ha podido mantener la pequeña diferencia con el atleta africano y ya en la meta, visiblemente emocionado, ha levantado los brazos para celebrar un bronce histórico.

Sebastian Coe ha ganado el oro con un espectacular registro de 3.32.53, seguido de su compatriota Steve Cram y de un José Manuel Abascal que también ha marcado un crono soberbio de 3.34.30. Finalmente destacar el magnífico 7º puesto (finalista) de Andrés Vera con un crono de 3.37.02.

Acababa la jornada olímpica de este sábado, madrugada del domingo aquí en España, con todos los ojos del Memorial Colliseum pendientes de la plataforma donde se encuentra el pódium. El escenario parecía un plató habitual de la cercana meca del cine. Sonaba la fanfarria olímpica, se encendían los focos y salían los tres medallistas a recoger sus preseas, como si fueran los protagonistas de un thriller con un desenlace sorprendente. José Manuel Abascal subía a recibir su medalla de bronce y veía como la bandera española ondeaba en el mástil iluminada por las luces angelinas.

Hoy es un día para sentirse felices y orgullosos porque todos los que amamos el deporte en general y el atletismo en particular, hasta hace bien poco nos conformábamos con ver a uno de los nuestros en una final, ya no mundial, sino europea.

Abascal ha sido valiente y no ha se ha conformado con ser un flamante finalista; ha arriesgado y su premio ha sido un botín mítico. Se ha convertido en el primer español en ganar una medalla en pruebas de pista en el deporte rey de los Juegos.

Esperemos que éste sea el primer paso para que en sucesivos Juegos podamos a ver a más medallistas españoles tanto en el atletismo como en otros deportes.

Nos vemos en los Juegos Olímpicos de Seúl!!!!!!!


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